La sesión inicia con una musicoterapia a 432 hertz que son frecuencias ideales para que el cerebro se introduzca en ondas alfa para obtener una introspección profunda a tú yo interior.
Continuamos con una exfoliación en el cuerpo de sales epsom y aceite de macadamia para remover células muertas; por unos minutos dejamos que penetre el exfoliante a tu piel para humectarla y promover una desintoxicación a través de una manta térmica que emite un calor que reconforta los músculos y el estado mental.
Una vez que se removieron las impurezas se aplica una tecnología de Biofotónica que aporta los siguientes beneficios:
Concluimos con la aplicación de mascarilla, crema de tratamiento y protector solar personalizados.
Ideal para: Todo tipo de piel, género y edad.
Frecuencia de aplicación: Cada dos meses